Gisele Bündchen y Tom Brady anuncian su separación

Después de muchas semanas de rumores en torno a cuál era el punto en el que se encontraban como pareja, Gisele Bündchen y Tom Brady han decidido poner fin a las especulaciones y anunciar su separación. La modelo –una de las mejor pagadas del mundo– y el jugador de fútbol americano han cerrado así una etapa de más de trece años de matrimonio en la que han tenido dos hijos en común Benjamin Rein Brady, de 12 años, y Vivian Lake Brady, de 9 años.

"Con mucha gratitud por nuestro tiempo juntos, Tom y yo hemos decidido firmar el divorcio de manera amistosa. Mi prioridad siempre han sido y continuarán siendo los niños, a los que amo con todo mi corazón. Seguiremos trabajando juntos para darles el amor, el cariño y la atención que ellos tan bien merecen. La decisión de terminar un matrimonio nunca es fácil, pero nos hemos tomado la decisión de separarnos. Por supuesto, es difícil pasar por algo así, pero me siento bendecida por el tiempo que hemos pasado juntos y solo puede desearle lo mejor a Tom. Os pido amablemente que respetéis nuestra privacidad durante estos días tan complicados. Gracias", ha escrito la top brasileña en un comunicado que ha publicado en sus stories de Instagram.

Tom Brady, por su parte, emitía por la misma vía unas palabras muy similares. "Hemos tomado esta decisión después de considerarlo mucho", podía leerse en su texto en el que afirmaba que habían "sido bendecidos con unos niños maravillosos" y que sus pequeños "continuarán siendo el centro de nuestro mundo en todos los sentidos".

La crisis definitiva

Parecían la pareja perfecta pero fue hace dos años cuando supimos que Gisele Bündchen y Tom Brady habían atravesado una profunda crisis en el 2018. El propio deportista lo confesó en una entrevista radiofónica al programa de Howard Stern en SiriusXM. "Hace un par de años, Gisele creía que yo no estaba cumpliendo con mi papel dentro de la familia. Sentía que yo solo me preocupaba de mi carrera y que ella tenía que encargarse de la casa y de todo lo demás. Además, pensaba que, una vez terminada la temporada de fútbol, yo llegaría a casa y sería como ‘bueno, aquí estoy, ponme al día’", desveló.

"Ella no estaba satisfecha con la manera en la que estábamos llevando el matrimonio y necesitaba que yo hiciese cambios. Estaba preocupada porque la dinámica que habíamos establecido parecía funcionar para mí, pero no para ella", contó Tom Brady, justo antes de entonar el mea culpa y analizar que, efectivamente, tenía que hacer algo al respecto: "Entendí que ella también tenía sus deseos y sus metas y los estaba posponiendo por mí. Así que, desde ese momento, cambié y todo mejoró", afirmó.

Que superaran ese bache no quiere decir que su matrimonio estuviese solucionado y la prueba es que apenas 24 meses después de aquello, los trámites de divorcio ya están en marcha. "Ella no cree que su relación pudiera ser reparada", dijo una fuente cercana a la pareja hace unas semanas a la revista People, la misma que afirmó que llevaban desde el mes de septiembre haciendo vidas completamente separadas.