Crioterapia facial o cómo el frío puede ayudarte a conseguir la mejor piel de tu vida
Te descubrimos una mascarilla con efecto lifting inmediato que combina el poder del frío con lo mejor de la naturaleza y de la ciencia, y todo de la mano de una firma tan deseada como Clarins.
Probablemente ya conozcas los beneficios de la crioterapia corporal, una técnica que consiste en proporcionar cuidados a la piel a través del frío. Puede ser para calmar el dolor o la inflamación, disolver la grasa, favorecer la recuperación física o incluso estimular la circulación sanguínea. Sin embargo, cuando se utiliza en el rostro, el tratamiento con frío mejora la calidad de la piel haciéndola más firme.
Hasta ahora, la única forma de acceder a la crioterapia facial era en un tratamiento de cabina, pero gracias a la nueva mascarilla Cryo-Flash Cream-Mask de Clarins, ya puedes disfrutar de las ventajas del frío en tu piel desde la comodidad de tu hogar. ¿Quieres saberlo todo sobre este producto que va a cambiar tu piel? Atenta.
Está comprobado que las bajas temperaturas aplicadas como tratamiento mejoran el estrés, la inflamación y la salud en general, pero si hablamos concretamente de cuidado facial, el frío es único para activar la microcirculación, actúa como un 'booster' de luminosidad y tiene un efecto lifting inmediato porque contrae los músculos.
De hecho, seguramente hayas visto en TikTok más de una tendencia viral, como el 'skin icing', que no es otra cosa que la aplicación de un producto helado en el rostro. ¿Lo malo? Que este tipo de truquitos no duran mucho tiempo, solo unos minutos, porque en el momento que retiramos el frío, la piel vuelve a su estado y a su temperatura habitual.
El reto, por tanto, era conseguir una fórmula que no solo consiguiera resultados a corto plazo, sino también a largo plazo. ¿Y cómo lo hicieron? Pues poniendo de relieve un proceso natural de la piel llamado 'flash calcio'. Se trata de una entrada rápida de calcio en las células que se produce cuando la piel está expuesta a bajas temperaturas, una especie de inyección de combustible que favorece la renovación celular, en concreto la de los queratinocitos, y ayuda a mantener la juventud de la piel. Así, el calcio penetra en las células en cuestión de segundos, y se estimula toda la regeneración celular.
Clarins descubrió cómo mantener los efectos del frío y del proceso de 'flash calcio' con su mascarilla Cryo-Flash Cream-Mask, gracias a las moléculas M.G.A. (un derivado de mentol puro que activa la penetración del calcio en la célula, previene el envejecimiento, tersa y reafirma la piel de inmediato) y un extracto de onagra bío 'cryo like' de efecto frío, una planta que resiste muy bien el frío (hasta -25º) y que activa biológicamente la penetración de calcio y potencia la síntesis de colágeno para reafirmar la piel y protegerla de los radicales libres.
Sus efectos se notan desde la primera aplicación, ya que baja la temperatura de la piel 4 grados (lo que te va a venir genial también en las noches de calor extremo), pero como esa bajada de temperatura se mantiene incluso después de que hayamos retirado la mascarilla, hace que los efectos también perduren en el tiempo.
De hecho, si se utiliza dos veces por semana, notarás cómo progresivamente tu piel está más tersa, los poros se minimizan, la luminosidad se reaviva y la piel está mucho más lisa y realzada. ¿Lo mejor? Que solo tendrás que aplicarla, dejarla actuar 10 minutos y retirarla con agua o con un disco de algodón impregnado en tónico. Y si quieres potenciar aún más la efectividad del producto, puedes guardarla en la nevera para que el contraste térmico sea aún mayor.
Pero no te creas que la cosa queda ahí, porque si eres de las que está comprometida con el medio ambiente y buscas en tus cosméticos ese plus de belleza responsable, has de saber que el 93% de ingredientes de este producto son de origen natural, que su packaging es eco sostenible (el 40% del vidrio del frasco y el 50% del plástico de la tapa son reciclados), y el cartón del estuche proviene de bosques gestionados bajo criterio sostenible. ¡Toma ya!