Elena Méndez: “Hay que practicar la escucha: a veces en las agendas solo aparecen las tareas y no las personas”

Pasamos un tercio de nuestra vida trabajando. Hacer que ese tiempo en la oficina se convierta en crecimiento, rentabilidad y talento es el objetivo que se marcó Elena Méndez con enEvolución, una empresa que ofrece asesoramiento a todo tipo de organizaciones para lograr que el esfuerzo invertido en el trabajo merezca la pena.

Podcast Woman Business ilustración

Woman Business, el podcast de la revista Woman. 

/ Jorge Arévalo

¿Es posible ser feliz en el trabajo? Elena Méndez, directora de enEvolución y experta en experiencia de empleado tiene claro que sí y va más allá: las organizaciones que apuestan por potenciar el talento de sus equipos y mimar el ambiente laboral son las más rentables, productivas y eficientes. Pero esto que a priori parece tan sencillo de conseguir, en realidad, no lo es. Por eso tanto ella como su equipo acuden “al rescate” de las organizaciones que desean “cambiar su mirada” y trabajar más, pero sobre todo trabajar mejor.

Puedes escucharlo en Spreaker, Spotify, Apple, iVoox, Google, Podimo y Amazon.

Para provocar el cambio que convierte una empresa en una maquinaria empática y eficiente la comunicación es la clave: saber crear un ambiente laboral seguro (donde se puede hablar con honestidad y desde el respeto) y, sobre todo, saber escuchar. “Lo peor que se puede hacer es actuar sin escuchar. Hay que dedicarle tiempo a la escucha, pero a veces en las agendas solo aparecen las tareas y no las personas”, asegura Elena Méndez que asegura que muchos problemas se solucionan, simplemente, escuchando al otro y generando la conversación adecuada.

Este cuidado de las relaciones en el trabajo es especialmente relevante desde que comenzó la pandemia y puede marcar la diferencia. “Esa escucha de la que hablamos, el reconocimiento por parte de la organización del esfuerzo que ha realizado el trabajador además del apoyo emocional, y una adecuada gestión de los conflictos, son temas básicos que hacen que un empleado recomiende la empresa en la que trabaja y más tiempos de covid”, explica la experta.

El objetivo es hacer sentir al trabajador que está incluido en un proyecto que tiene en cuenta los objetivos de la organización, pero que también escucha sus necesidades para aplicar, a continuación, el sentido común. “Por ejemplo, teníamos un cliente que estaba muy orgulloso del kit de bienvenida que le daba a los nuevos empleados, algo en lo que se gastaba muchísimo dinero. Pero cuando le preguntamos a la gente nueva qué era lo que más habían valorado al entrar en la empresa nombraron dos cosas: que hubiera alguien que les recibiera el primer día y les explicara sus funciones y que alguien les dijera dónde estaban el comedor y el baño”, comenta Méndez. Y es que a veces hacemos lo fácil complicado “y nos vamos a cosas muy sofisticadas que no son prioritarias en vez de preguntar qué necesita la gente”.

Síguele la pista

  • Lo último