Kate Middleton recicla el look que usó para la boda de Meghan MarKle y confirma el poder del 'total white'

Demostrando que el reciclaje de prendas y la sostenibilidad es una de las tendencias del lustro, y que la moda no es para un solo uso, ni siquiera cuando se trata de vestidos de invitada en bodas que han sido televisadas en todo el planeta, Kate Middleton nos ha proporcionado este lunes un estilismo que cumple lo anterior (con creces) y, además, remite a su cuñada, Meghan Markle, en varios aspectos.

Para empezar, el look con el que la duquesa de Cambridge ha brillado en la conmemoración del Día Anzac, en la Abadía de Westminster, que recuerda a los soldados del Reino Unido e Irlanda que perdieron su vida el 25 de abril de 1915, durante la I Guerra Mundial, en Gallipoli, es el mismo que lució en la boda de Meghan Markle y el príncipe Harry, en 2018.

Se trata de un abrigo-vestido luminoso, que algunos aseguran que es vanilla; otros, crema y otros, blanco firmado por Alexander McQueen (y que en su momento nos recordó a otro que había lucido la reina Letizia en una visita oficial a Londres). Es sobrio, elegante, protagonizado por líneas depuradas y constituye, sin duda, una de las apuestas favoritas de la esposa del príncipe Guillermo para actos públicos, ya que incluso antes de la boda del príncipe Guillermo, se lo habíamos visto hasta en tres ocasiones (sí, Kate Middleton no lo estrenó para el enlace).

Así, fue el modelo que eligió para el bautizado de su hija Charlotte, en 2015; para el cumpleaños de la reina Isabel en el acto 'Trooping the color' de 2016 y para el 100 aniversario de la batalla de Passchendaele, en 2017.

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Ahora ha vuelto a brillar pero siempre añadiendo un twist gracias al tocado, que ha ido variando en cada celebración. Así, si en otros momentos eligió una pamela o tocados de color blanco, en esta ocasión ha optado por, de nuevo, reciclar la voluminosa diadema muy similar a la que llevó en el bautizo de su hijo Louis, de Jane Taylor, pero desprovista del adorno con motivos vegetales de entonces, dándole un aspecto totalmente distinto.

El color del vestido ('casi blanco') confirma, como ya hizo Meghan Markle en su última visita a Holanda, donde atrapó todas las miradas con looks blancos en prácticamente todos los actos en ese color, que el tono más luminoso de la paleta es capaz de elevar cualquier look para convertirlo en una propuesta de 10. Para completar el estilismo, Kate Middleton ha elegido unos zapatos tipo salón de ante en color negro, de Gianvito Rossi; pendientes de perlas, 'clutch' de Jenny Packham y pintalabios fresa oscuro.

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