Cómo limpiar unas Converse blancas

El truco definitivo para que tus zapatillas favoritas vuelvan a parecer como nuevas después de tanto tute. 

Zapatillas Converse blancas

Zapatillas Converse blancas.

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El mundo se divide entre quienes adoran la sensación de estrenar Converse blancas que se vean impolutas y quienes prefieren el encanto que tiene cuando pierden esa pureza y alcanzan una tonalidad casi amarillenta. Si eres del segundo grupo no tenemos mucho que decirte porque basta con utilizarlas para conseguir el objetivo deseado pero, si lo que quieres es que parezcan siempre como nuevas sigue leyendo porque te interesa.

Existen varias formas de limpiar unas zapatillas blancas. Una de ellas es la que propone toda una experta en el campo, la conocida en redes como La ordenatriz. Su método infalible es poner agua muy caliente, meter las zapatillas, y poner un cacito de percarbonato que puedes encontrar en multitud de supermercados. Déjalas sumergidas unas dos horas y cepíllalas después con cepillo nuevo o que utilices en exclusiva para eso. Enjuágalas con agua bajo el grifo mientras las cepillas y déjalas secar pero nunca al sol ni cerca de una fuente de calor.

La mejor fórmula para cuando necesitas limpiar las Converse de manera menos profunda es ayudarte simplemente de un cepillo de dientes. Gracias a sus pequeñas cerdas puedes frotar mejor aquellas manchas más intensas o en las partes a las que no puedes llegar fácilmente. Con agua y jabón consigues eliminarlas al instante.

Otro método infalible para conseguir que renazcan unas zapatillas de lona es el empleado por la conocida como @evalaordenada. Ella utiliza para limpiar la goma si está muy sucia o amarillenta una piedra blanca o un borrador mágico y, para la tela, bicarbonato y vinagre de limpieza que rocía sobre ellas para después dar con un cepillo hasta arrastrar toda la capa de suciedad.

Con cualquiera de estos métodos el objetivo estará más que conseguido porque debes recordar que recurrir a la lavadora no es una opción recomendable si quieres que se mantenga su forma, su textura y su tallaje original. ¡Ah! y no te olvides de los cordones, estos también necesitan un agua aparte para que el resultado final sea el esperado.

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