¿Os atreveríais a llevar un vestido de novia como el de Ana Guerra? Corto, con hombreras, encaje y flecos

Ana Guerra sigue de dulce. La cantante no para de acumular proyectos profesionales exitosos, tanto encima de los escenarios como fuera de ellos. Su gusto por la moda, su influencia en los más jóvenes, tanto en los millenials como en la generación Z, y el idilio de su eterna sonrisa con las cámaras son los ingredientes perfectos para que las firmas se interesen por su potencial como imagen.

Esto es justo lo que ha debido pensar Pronovias, que ha escogido a la canaria para abanderar su nueva colección de cara al 2020, The Party Edit, que la firma catalana ha presentado junto a la artista en su flagship de Madrid.

Ana y Pronovias han querido dejar claro que los nuevos aires que soplan también se reflejan en las novias de la década que está a punto de arrancar. Existe un amplio espectro de jóvenes que apuestan por huir de los convencionalismos, por lo que el vestido de sus sueños se aleja mucho de lo que culturalmente tenemos en la cabeza como un vestidazo de boda. No es que esto se haya acabado, ni mucho menos, pero ahora comparte protagonismo con otros estilos que han tirado abajo el muro que mantenía a la moda nupcial un poco aislada del exterior.

Para esta ocasión tan especial, Guerra ha escogido sus cinco diseños favoritos de la nueva línea de la casa especializada en moda nupcial. Además de ser expuestos en la tienda de la capital, la tinerfeña se ha atrevido a someterse a una "primera prueba" de vestuario al posar con uno de los originales vestidos de una colección rompedora; no en vano, una de sus selecciones es un modelo en color negro.

La voz de Lo Malo junto a su amiga Aitana Ocaña ha lucido una creación espectacular que recuerda por su decoración recargada con apliques que cubren toda la pieza y por su largo mini a los diseños de fiesta de los felices años 20. El diseño de Pronovias destila fantasía gracias también a otros detalles como los larguísimos flecos que lo rematan colgando de sus mangas largas.

El escote en V, la gran estrella del momento en los diseños de fiesta, y los hombros marcados, otra de las tendencias de la temporada, completan las líneas maestras de un vestido hecho a medida para todas las mujeres que ansíen diferenciarse del prototipo de novia o, por qué no, para las que tengan el sueño de vestirse como tal sin necesidad de casarse, ya que es un vestido perfectamente adaptable a otro tipo de eventos.