El dos piezas de Anya Taylor-Joy en los Globos de Oro para brillar de amarillo

Puede que se fuera a casa con las manos vacías porque el premio al que optaba –estaba nominada en la categoría de mejor actriz de comedia por su papel en la película El menú que protagoniza junto a Ralph Fiennes– se lo llevó Michelle Yeoh por Todo a la vez en todas partes, pero desde luego Anya Taylor-Joy no pasó en absoluto desapercibida.

Su presencia sobre cualquier alfombra roja es un valor seguro, más aún en esta esperada entrega de los Globos de Oro, que después de un años de capa caída lograron recuperar gran parte de su esplendor.

La intérprete que se dio a conocer al público masivo por su papel en la serie de Netflix Gambito de dama acudía al hotel Beverly Hilton de Los Angeles dispuesta a sorprender una vez más.

En esta ocasión no lo hacía con un vestido de látex, ni cargada de brillos como una reina de hielo como en sus últimas apariciones. Su elección para esta gala ha sido la de un dos piezas de color amarillo con el que desafiaba cualquier tipo de superstición.

Dior firma el conjunto formado por crop top de escote palabra de honor con lazo trasero y falda larga que también pone el énfasis en la espalda que ha lucido Anya Taylor-Joy. Un diseño mucho más minimalista que los que ha escogido en anteriores ocasiones y que ha acompañado de un llamativo collar, unas pulseras y unos pendientes a juego, todo de Tiffany & Co.

Pero las joyas no han sido las únicas que han lucido doradas. Sus uñas, cuyo diseño ha corrido a cargo de Kim Truong que es quien se encarga de la manicura de las hermanas Kardashian, también lucían con un espectacular tono metalizado muy propio para una noche así.

Su larga melena rubia ha quedado peinada ultralisa y suelta con raya en medio y tan solo ha retirado los mechones delanteros de uno de los lados con una original torsión para dejar despejado parte del rostro de modo que se apreciara su elegante maquillaje lleno de luz.