20 años después de su estreno, estas son las cosas que Bridget Jones hoy no habría hecho (porque serían políticamente incorrectas)

El personaje de Bridget Jones se convirtió en icono femenino de 2000. ¿Aún nos representa? En parte... con matices. 

 

Bridget Jones
Bridget Jones / D.R.

La primera película del universo de Bridget Jones, 'El diario de Bridget Jones', se estrenó un día como hoy hace exactamente 20 años en las salas de cine estadounidenses convirtiéndose de inmediato en un gran fenómeno de taquilla y erigiendo a su protagonista, que encarnaba Renée Zellweger, en representación de una mujer 'single' treintañera (¿o, todavía entonces, solterona?) relativamente moderna cuya hazaña fue erigirse en icono femenino (y antiheroico) que, muchas sintieron, hablaba su mismo lenguaje.

Las bragas XL y, supuestamente, antilujuria que siempre guardaba en el cajón entre otros modelos reservados para ocasiones especiales (hoy muchos diseñadores habrían discrepado de lo antiestético de aquella apuesta), las noches de sofá y manta devorando helado tras un fracaso amoroso o el hartazgo de los consejos de padres y vecinos de mediana edad que apremiaban a Bridget para que se casara y tuviera hijos (por ese orden) porque podría "pasársele el arroz" se han quedado grabados en la memoria de toda una generación que adoptó sus bromas e imágenes como propias. Y que vivió una polarización entre quienes la acusaban de sexista (porque Britney vivía obsesionada por perder kilos y tener pareja, decían) y quienes sostenían todo lo contrario (porque, al fin y al cabo, vivía sola, libre y se enamoraba de hombres de dos en dos. ¿No era eso innovador y una prueba de la existencia del deseo femenino?).

Renée Zellweger en la película 'Diario de Bridget Jones: Sobreviviré'
Renée Zellweger en la película 'Diario de Bridget Jones: Sobreviviré' / ©Universal Pictures

De cualquier forma, es seguro que Bridget Jones habría adoptado hoy un tono diferente o habría omitido o añadido determinadas realidades para convertirse, como lo hizo entonces, en el retrato de una generación. Esto, seguro, son las cosas que habrían cambiado:

1. LIBRE DE HUMOS

Uno de los grandes objetivos a cumplir por Bridget Jones era, junto con adelgazar, dejar de fumar. Eran los tiempos en los que todavía se fumaba en el interior de los bares y restaurantes (en España, se prohibió hacerlo en 2011, hace exactamente una década) y la tolerancia ante el tabaco era mucho mayor. Hoy aún parte de la población comparte esta adicción pero en menor medida. Seguramente Britney habría fumado en el pasado pero ya lo habría dejado al protagonizar su primer filme. Actualmente, series y películas han desterrado el tabaco de sus fotogramas y es muy raro ver a algún personaje lucir cigarrillo si no tiene una razón de peso o es realmente marginal.

'Bridget Jones’s Baby'
'Bridget Jones’s Baby' / D.R.

2. ¿DÓNDE ESTÁ EL 'GYM'?

Seguramente, los buenos propósitos de Bridget en 2021 habrían tenido menos que ver con la nicotina y sí con abrazar ciertas rutinas gimnásticas, que no aparecen demasiado en su debut. De hecho, el deporte se contempla casi de soslayo para solucionar su supuesto sobrepeso; prácticamente única solución que ella enarbola es la de reducir su dieta. Lo de la vida saludable y la rutinas (que, seguramente, abarcaría yoga) pasa a un segundo plano.

3. ¿GORDA? NO, CURVY

El que la protagonista, con una talla 42, se lamentara de su cuerpo hubiera resultado extraño o políticamente incorrecto. Ya en el pasado la elección de algunas marcas de modelos con talla 42 para mostrar sus modelos 'oversyze' han generado muchísima polémica. ¿Te acuerdas, por ejemplo, de la de Lorena Durán?

Renée Zellweger y Hugh Grant en 'El diario de Bridget Jones'
Renée Zellweger y Hugh Grant en 'El diario de Bridget Jones' / ©Universal Pictures

4. EL TÍTULO

¿'El diario de Bridget Jones'? Hoy en día, Bridget hablaría el lenguaje de Instagram, Tick Tock o, incluso, Twitch y seguiríamos sus desgracias y alegrías en las redes sociales.

5. LAS TENDENCIAS

¿Recuerdas lo avergonzada que se sentía la protagonista por lucir un jersey navideño que su madre le había regalado (y ella se sentía casi forzada a ponerse para no desilusionarla)? Lo utilizó durante una visita prenavideña a unos amigos -la familia de Mark Darcy-. Hoy los 'jerseys feos navideños' son lo más y una de las piezas más cotizadas del guardarropa de diciembre.

¿Y tú, eres del 'team' Bridget?

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