Las primeras palabras de Leire Martínez tras conocerse su salida de La Oreja de Van Gogh: "Yo no he firmado"

La noticia de que Leire Martínez, la solista del grupo de La Oreja de Van Gogh desde hacía 17 años, abandonaba la banda asaltaba este lunes por sorpresa los medios. "Después de que 17 años maravillosos repletos de música y emociones que jamás olvidaremos, queremos anunciar que las trayectorias profesionales de Leire y La Oreja de Van Gogh seguirán caminos separados", anunciaba la formación en un comunicado .

Mientras la banda, desde su página web oficial, tildaba la decisión de "dura y difícil" ("llega después de mucho tiempo de reflexión y profundas conversaciones en las que no hemos conseguido acercar nuestras diferentes maneras de vivir el grupo", explicaba, sugiriendo un desacuerdo entre la solista y el resto de músicos), los perfiles oficiales de Leire Martínez permanecían en silencio. Ni una palabra.

Ya las lágrimas que derramó mientras interpreta 'Rosas' en su último concierto en Zaragoza, tal vez cuando ya sabía que esa sería la última vez que se subiría al escenario como 'front woman' de La Oreja de Van Gogh (se trataba del directo que marcaba el fin de la gira), ponían de manifiesto que la artista estaba especialmente conmovida.

Aunque ella no se ha pronunciado, su amiga la presentadora Mar Montoro sí ha desvelado como se siente la cantante en el programa 'Juntos' de Telemadrid, y ha leído el mensaje que esta le había hecho llegar a su móvil.

"'El grupo ha comunicado lo que ha considerado. Yo no he firmado el comunicado. Cuando considere, y me encuentre bien, yo misma contaré lo que sea, pero, por el momento, no tengo mucho que decir".

Al hilo de lo ocurrido, hemos recordado de unas palabras que Leire Martínez pronunció en una entrevista que concedió en septiembre al espacio 'Cara a cara' en Navarra Televisión (en las imágenes más abajo), y que pueden ser reveladoras.

Se celebró en un momento en el que habían estallado los rumores de que Amaia Montero, exsolista de la banda, podría volver a formar parte de La Oreja de Van Gogh, algo con lo que algunos fans nostálgicos fantaseaban de vez en cuando (y que podía ser molesto para Leire Martínez).

Tras ser preguntada sobre una posible colaboración con Amaia Montero, explicó que las colaboraciones tenían que surgir de "una forma natural". "Ella [Amaia] está muy inmersa en sus proyectos y nosotros, en los nuestros (...). Las relaciones en aquel momento se enfriaron, de hecho ella dejó el grupo y luego las cosas han ido a mejor. Hoy en día no sabría decirte si sería posible una colaboración porque no se ha vuelto a hablar", indicó.

Pero añadió algo más: "Me sorprende que 16 años después todavía tenga que contestar sobre Amaia (...). Y que a mí se me siga preguntando por ella entiendo que hay un morbo pero ha tenido que quedar algo sin resolver porque no entiendo que 16 años después todavía esto genere tanto runrún".

"No me gusta que me ninguneen"

Sobre los rumores del regreso de Amaia a la banda, explicó: "No me gustan las faltas de respeto. Que se diga que Amaia vuelve al grupo no me importa, no me afecta para nada, lo que no me gusta es que se me ningunee. Yo es algo que ahora mismo no me planteo y, además, será el grupo el que tenga que decir si esto va a ser así o no. Lo que no me gusta es escuchar es: 'Ah, pues bien, qué maravilloso que vuelva'. ¿Y yo qué? Parece que a todo el mundo se le olvida que hay una cantante en el grupo, que llevo 16 años. Me resulta feo eso, el ver que parece que no importa nada", aseguró entonces.

"Entiendo cuál es el juego y que ha habido cierto interés en poner el foco en nosotrasy en generar esto", opinó.

"La historia no da para más"

"Ella [Amaia] estuvo, lo hizo superbien, es una tía supercarismática y maravillosa y después decidió dejar el grupo y entré yo. Ya está. La historia no da para más", afirmó.

Además, explicó en qué punto se encontraba La Oreja de Van Gogh: "La Oreja de Vang Gogh está mirando hacia el disfrute, y valorando lo que tenemos. Después de tantísimos años, el poder seguir en activo y al nivel en el que estamos [es de valorar]. Ya no miramos tanto la cantidad como la calidad", explicó.