Qué es la psicología de emergencias

Las últimas semanas han sido trágicas y dramáticas pero también han sido días de mucho aprendizaje y reflexión. Entre los muchos expertos que estos días nos han aportado su valiosa opinión y experiencia sobre muchos temas relacionados con la DANA de Valencia, también han estado los psicólogos, ese valioso equipo humano tan necesario en momentos, precisamente, como el que estamos viviendo. 

Uno de ellos ha sido el psicólogo Buenaventura del Charco Olea, más conocido en redes como @ventura.psicologo, que lejos de divulgar información a lo loco, ha sido especialmente cauto y útil al destacar y recordar la importancia de la psicología de emergencias, una “desconocida” hasta, lamentablemente, estos momentos. 

¿Y por qué es tan importante dejar a los profesionales especializados en emergencias este momento tan delicado?

Pues lo explica en un post excepcional. 

La psicología de emergencias es una rama de la psicología que se centra en la intervención y el apoyo psicológico en situaciones de crisis como la de las últimas semanas. Es decir, desastres naturales, accidentes graves, atentados y/u otras situaciones extremas. El objetivo: ayudar a las personas en el manejo del estrés y las reacciones emocionales que surgen en estos contextos.

La diferencia respecto a otras áreas de la psicología radica en varios puntos clave. Por un lado, cómo hace el enfoque sobre el problema. A diferencia de la psicología clínica, que trata problemas de salud mental a largo plazo, la psicología de emergencias se centra en la intervención inmediata. 

Además, las intervenciones son breves y a corto plazo y están especialmente diseñadas para que las personas que están viviendo ese momento de shock, tengan las herramientas necesarias para poder manejar sus emociones, el estrés y puedan adaptarse a la situación de crisis mejor.

La importancia de los equipos de psicólogos de emergencias radica en que son un equipo de primeros auxilios psicológicos. Su labor está, como dice Ventura, en “brindar apoyo emocional, proporcionar información calve y de seguridad, prevención de psicopatologías, facilitar la comunicación entre víctimas y autoridades o la esperanza a los afectados”. Y todo este valioso trabajo, se asienta, tal y como explica el profesional, en 4 principios: la proximidad, la inmediatez, la simplicidad y la expectativa. 

Proximidad, porque debe hacerse lo más cerca posible del lugar donde ha sucedido el suceso. “Esto facilita el acceso a las personas afectadas y permite una intervención rápida, reduciendo el riesgo de desplazamiento innecesario y mayor estrés”, explica Ventura. 

Inmediatez, porque la intervención psicológica debe hacerse lo antes posible tras la emergencia. “La respuesta temprana es fundamental para evitar el desarrollo de problemas emocionales a largo plazo y facilita una recuperación más rápida”, dice. 

Simplicidad, porque la actuación tiene que ser fácil y adaptada a lo que se necesita en el momento más inmediato. “Técnicas simples de apoyo emocional y psicológico son preferibles en este contexto, priorizando la estabilidad y el bienestar general”, explica el psicológo. 

Y por último y en cuanto a las expectativas, Buenaventura del Charco recuerda que “los profesionales deben transmitir una sensación de normalidad y esperanza, ayudando a las personas a entender que sus reacciones son normales ante una situación anormal. Esto promuebe la resiliencia y facilita el retorno a sus actividades cotidianas”. 

Lanza también un mensaje a todos los compañeros de profesión a través de su post, matizando que es una “llamada a todos los que queremos ayudar para templar nuestros ánimos y entender que no se trata sólo de voluntad, sino de hacerlo de forma adecuada”, porque tal y como explica “cuando se asienten las cosas llegará el momento de ayudar en duelos, fobias, traumas y otros problemas que surgirán tras esta catástrofe y ahí si podemos ayudar. No se trata de actuar ya (aunque queramos aliviar y colaborar ante el drama), sino de hacerlo de la forma adecuada, ser paciente con cómo ayudar, ser buen profesional y mirar por la salud mental de las personas”.