Carrie Fisher y John Belushi, de almas gemelas a estrellas de culto

"Oye —le dijo John Belushi una vez a Carrie Fisher—, tú eres como yo. Ellos son diferentes —comentó en referencia a Judy, su esposa, y Danny Aykroyd, que entonces era pareja de la actriz—. Nosotros somos iguales". Así describió el malogrado actor, protagonista de 'Granujas a todo ritmo' su relación de amistad con Carrie Fisher, con quien coincidió en dicha película, dirigida por John Landis, y, previamente, en 'Saturday Night Live'.

Por aquellos años, a inicios de los 80, Carrie Fisher disfrutaba de un gran reconocimiento debido a su interpretación de la princesa Leia Organa en la primera película de la saga dirigida por George Lucas, 'La guerra de las galaxias'. En concreto, el Episodio IV, 'Una nueva esperanza' se había estrenado en 1977, un año antes de que la propia Carrie debutara en el programa de entretenimiento, uno de los más longevos de la pequeña pantalla y que aún continúa su curso, con invitados estrella como Rosalía, que recientemente se ha estrenado interpretando dos de las canciones de 'Motomami'.

En concreto, Carrie Fisher fue la presentadora del programa emitido el 18 de noviembre de 1978, momento que acompañó a los Blues Brothers, un dúo cómico creado unos meses antes por John Belushi y Dan Aykroyd y en cuya película también participaría dos años después. La actriz solo tenía 22 años y ya había tenido la oportunidad de trabajar con grandes actores como Harrison Ford, de quien estuvo muy enamorada, y directores, como George Lucas. A pesar de su corta edad, pronto comenzó a ser una de las mujeres más influyentes de la industria precisamente por su buen sentido del humor.

Ese fue uno de los motivos por los que John Belushi, de quien hace unos días se ha cumplido el 40 aniversario de su muerte, encontró en Carrie un alma gemela, quien lo fue hasta que el actor falleció a los 33 años de edad por un cóctel de cocaína y heroína. Fue una amistad corta, pero muy intensa, donde no faltó la juerga y las drogas. La leyenda apunta a que fue precisamente Belushi quien la invitó a este triste mundo del hedonismo y las adicciones, del que nunca se alejó. Basta con conocer el informe del deceso de la actriz, que falleció en diciembre de 2017, para comprobar que aún seguía tomando metadona, etanol y otros opiáceos.

Tampoco puede decirse que tuviera una infancia feliz, con un padre ausente, el cantante Eddie Fisher, que las abandonó a ella y a su madre, Debbie Reynolds —actriz de 'Cantando bajo la lluvia— por Elizabeth Taylor. También desde muy joven fue diagnosticada con un trastorno de bipolaridad, que intentó ahogar años después junto a Belushi y compañía en fiestas donde no faltaban sustancias para deshinibirse y olvidar.

La reciente biografía del cómico estadounidense de 'Desmadre a la americana', 'Como una moto —La vida galopante de John Belushi—', editada recientemente en España por Libros del Kultrum, presenta algunas de los momentos que ambos actores compartieron, ya que pasaban largas noches juntos con sus respectivas parejas. A pesar de que Belushi estaba casado con Judy, guionista del 'SNL', y que Carrie salía con su compañero, Danny (más conocido por ser uno de los actores de 'Cazafantasmas', siempre hallaron el uno en el otro su propio ángel de la guardia. Sin embargo, fue Carrie quien intentó que este dejara de consumir cuando ella misma se vio inmersa en una espiral que casi acaba con su vida.

Por eso, además de momentos de locura, lo que esta biografía recoge son las idas y venidas de ambos y cómo, a pesar de las circunstancias, Carrie siempre quiso cuidar de su amigo. Así, en el esta biografía algo sensacionalista escrita por Bob Woodward, se recuerda la frustración que Carrie sintió cuando supo que su compañero, que momentáneamente había elegido el buen camino, había fulminado ese esfuerzo tras consumir cocaína en otra de estas fiestas, en Los Ángeles.

Fue entonces cuando, por primera vez, se dio cuenta de que podía morir únicamente mirándole a los ojos. No les hacía falta nada más para entenderse en lo bueno y en lo malo. Lamentablemente eso mismo fue lo que le llevó a la muerte en 1982 por una sobredosis y que, 35 años después, entre otros problemas de salud, acabaría con la vida de su mejor amiga.

Cuando falleció John Belushi, lo primero que Carrie pensó en el funeral fue: "Toda esta gente a la que he visto consumir drogas él, ¿sabe lo que estaban pensando? ¿Deseando? Que aquello que le mató no fuera lo que más les gustaba", según revela Woodward en esta obra. Hubiera sido interesante qué es lo que hubiera pensado el actor al ver desaparecer a su otra mitad. Desgraciadamente, solo dos almas gemelas estarían destinadas a encontrarse de este modo.