Llega a España 'Geek Girl', la trilogía literaria de moda

Una chica de 14 años, larguirucha y delgada, la freaky del colegio, el blanco de todas las burlas es descubierta en un baño por una agencia de modelos. De repente de ser la geek de la clase se convierta en la más chic, en la que se codea con modelos y diseñadores, viste abrigos de cashemire y se pone (al menos en los desfiles) zapatos de Prada que sus compañeras de clase solo han visto en Vogue.
Es el argumento de la última saga juvenil de éxito en Reino Unido (400.000 ejemplares vendidos) pero es también en cierto sentido la historia de Holly Smale, la autora del libro quien sufrió acoso escolar y a los 14 años fue descubierta por una agencia de modelos que la subió a desfilar en una pasarela. El primer libro de la trilogía, Geek Girl, acaba de ser publicado por Destino y Holly Smale cuenta en exclusiva para WOMAN su relación de amor y odio con la moda.
Tuviste la suerte de ver cumplido el sueño de muchas adolescentes, que una agencia te descubra y te suba a desfilar a una pasarela, ¿Cómo fue tu experiencia?
Mi primera reacción fue de mucho miedo porque no conocía nada del mundo de la moda y no lo entendía. Así que mi postura fue algo así como “yo contra el mundo de la moda”.
Sin embargo, al pasar el tiempo y empezar a ponerme ropa de calidad, abrigos de cachemir, zapatos de Prada o vestidos de Gucci aprendí a apreciar el buen diseño y la creatividad y la diversidad y empecé a ver la moda como una forma de expresión.
¿Crees que es un mundo que las adolescentes tienen muy idealizado?
He escrito este libro (Geek Girl) para entre otras cosas contar los aspectos menos glamorosos de la moda porque las adolescentes solo ven el producto final y no saben lo duro que es el trabajo que hay detrás. No ven que a veces pasas horas caminando con unos zapatos que te quedan pequeños o que a veces no te entra un vestido y te tienen que ajustar un clip por detrás … no se dan cuenta de que ese producto final es fruto de una producción en la que trabaja mucha gente y no es representativo de la realidad. También quería contar que las modelos no son esas criatura perfectas y divinas que caminan como si levitaran sino que son personas normales que pueden tener el pelo grasoso, un grano en la cara , o tener un mal día.
¿Crees que la relación de los adolescentes y de los adultos con los famosos ha empeorado con Internet?
Creo que las redes sociales te hacen creer que todo el mundo tiene una vida mejor que la tuya y esto pasa con los famosos pero también con los amigos. Todo el mundo escoge las fotos que publica, va editando su vida, enseña lo que más le gusta , así que no es toda su vida o al menos no es una impresión real de su vida. Y creo que los adolescentes tampoco son capaces de distinguir que esa no es la realidad sino una visión mejorada y editada de la vida de una persona. Y al final se genera una competencia por ver quién tiene la mejor vida.
¿Qué aprendiste sobre la naturaleza humana en el mundo de la moda?
Me enseñó que hay muchos tipos de personas porque yo venía del mundo pequeño de mi instituto y de repente entré en el mundo de la moda y empecé a tratar con personas muy variadas y eso me abrió la mente. También aprendí que incluso las personas más bellas y con más éxito podían sentirse inseguras. Aunque tengo que decir que algunos de ellos tienen una seguridad y una soberbia aplastantes.
¿Qué fue lo que menos te gustó?
Dos cosas: La primera fue sentir que era el centro de todas las miradas. Por ejemplo, en una sesión de fotos sentir que todos me miraban, el fotógrafo, los estilistas, los maquilladores … era algo que no me gustaba ni disfrutaba especialmente. El segundo fue la naturaleza competitiva del mundo de la moda. Odiaba poner a competir con mi cara contra otras caras, con mi cuerpo contra otros cuerpos, y como el aspecto físico es muy personal esa competencia a veces alcanza niveles muy primarios y personales. Me pareció muy duro.
¿Además de todo esto qué otros criterios te hicieron dejar la moda por las humanidades y dedicarte primero a enseñar en un instituto y luego a escribir libros para adolescentes?
Siempre he querido escribir, desde los cuatro años he escrito montones de historias y siempre me gustó trabajar de profesora en un Instituto y llegó el momento en que entendí que mi trabajo de modelo estaba retrasando mi trabajo de profesora, y de escritora, entonces decidí que este aventura temporal que había sido la moda había terminado y decidí dejarlo y centrarme en mi mundo.
¿En cuánto tiempo terminaste el primer libro y luego cuánto tiempo pasó hasta terminar la trilogía?
Con el primer libro tardé dos años pero estaba trabajando a tiempo completo como profesora, así que escribía en mi tiempo libre y los fines de semana. A partir del segundo libro ya me dedicaba a la escritura a tiempo completo, así que el segundo me tomó un año, el tercero nueve meses y el cuarto, seis meses. Ha sido mi libro más rápido pero supongo que eso se debe a que ya tengo más práctica.
¿Se dice que ya la gente no lee, mucho menos los adolescentes, cómo te explicas el éxito de tu trilogía en Reino Unido?
Yo creo que las chicas se identifican muy rápido con la parte femenina del libro, es un libro fácil de leer y que además, les emociona. El personaje principal es una chica normal, no es una chica perfecta, comete errores y creo que las adolescentes se identifican mucho con el personaje.
¿Harriet Manners, el personaje central del libro, está construido a partir de tu adolescencia? Tú también sufriste bullying en el colegio y, de hecho, tu padre se enteró cuando leyó tu primer libro.
Cuando escribí el libro estaba trabajando de profesora en Japón y eso me vino bien para contar la vida de los adolescentes de hoy , aunque tengo los recuerdos de mi propia adolescencia muy frescos y todavía hoy en día a veces pienso como una adolescente
Creo que siempre ha sido difícil ser adolescente pero creo que ahora es un poco peor por culpa de las redes sociales que añaden presión. El principal problema de un adolescente es encontrar su identidad, lidiar entre quién es y quién cree que debería ser.
Respecto al acoso el problema es que con las redes sociales no hay escapatoria, antes cuando era pequeña y sufría bullying en el colegio llegaba a casa y todo se acababa, no tenía más contacto con nadie hasta el día siguiente . Hoy las redes sociales se van contigo y te persiguen, debe ser muy fácil para un niño sentirse atrapado . Sí, mi padre se enteró de que yo había sufrido acoso leyendo la novela, cuando yo ya tenía 31 años, y sé que se sintió muy mal, pero a mi se me hizo muy difícil contar la historia en su momento a mis padres porque de algún modo me sentía culpable de lo que pasaba.
¿Cómo crees que debe ser una chica para ser la más popular del colegio?
Yo creo que la seguridad en uno mismo es lo que hace a una persona atractiva. Del mismo modo la falta de confianza es lo que te convierte en blanco del acoso. Es como en el mundo animal si los otros notan que eres inseguro, que tienes miedo, que estás ansioso … te van a atacar.
Toda la historia gira en torno a la capacidad de reinventarse. Un concepto, la reinvención, muy de moda por los años que llevamos de crisis. ¿Qué le dirías a alguien que esté intentando reinventar su vida?
Creo que lo más importante es aprender a apreciar quién eres y tener el coraje para ser quién eres. Una de las lecciones más importantes que Harriet, la protagonista del libro, aprende es que puedes cambiar de ropa, puedes cambiar todo tu armario por uno más caro (es lo que le pasa a ella mientras trabaja como modelo) pero no puedes cambiar tu esencia. Lo que sí puedes hacer es dar los pasos necesarios para adquirir más confianza y seguridad en ti misma. Creo que debes llenar tu vida con las cosas que te apasionan , que no son necesariamente las cosas que le gustan o le apasionan a los demás. Creo que el aspecto físico no es lo más importante pero sí ayuda a conseguir confianza, así que si hay que cambiar pequeñas cosas para estar más a gusto con uno mismo yo creo que se deben hacer. Aunque creo que en lugar de cambiarse a uno mismo lo mejor es dedicarse a las cosas que a uno le gustan y rodearse de gente a la que también le gusten las mismas cosas.
Síguele la pista
Lo último