El desayuno que cambiará tu vida: saludable, sin azúcar y además adelgaza
Hay muchas formas deliciosas de empezar las mañanas con energía que no suman demasiadas calorías. Te contamos cuáles son y cómo prepararlas en casa.
Finales de enero y seguimos dándole vueltas a la dieta posnavideña. No estás sola. Somos muchas y muchos los que seguimos en pleno plan de “desintoxicación” de azúcar y excesos. Es completamente lógico que quieras volver a tu peso habitual y que tengas prisa por hacerlo; sin embargo, es recomendable que lo hagas de una forma ordenada y saludable. Nada de dietas milagro o de saltarte comidas como el desayuno porque sí.
Los especialistas médicos y los dietistas nutricionistas siempre insisten en ello: se trata de comer mejor, y eso pasa por elegir bien los ingredientes de nuestro carro de la compra y por controlar las cantidades. Es decir, no hace falta que te vayas a trabajar sin nada en el estómago, ni que estés “muriéndote de hambre” toda la mañana, escuchando las llamadas de tu tripa. Puedes desayunar, pero quizá debas plantearte un cambio de menú.
Si eres de las que no puede resistirse a un dulce recién levantada, o de las que unta en su tostada cremas de frutos secos o de cacahuete, o si no puedes reprimir tus ganas de brunch entre semana —te levantas con tiempo para disfrutar de un desayuno de tres platos—, es hora de echar el freno si tu objetivo es perder peso o, al menos, controlarlo. Párate y prueba otras opciones. Aquí tienes una lista de ideas variadas para tus nuevos desayunos saludables.
Vasitos de yogur con fruta
Es lo más rápido y fácil que puedes preparar en casa. Te basta un poco de yogur natural y una o varias frutas troceadas, a las que puedes añadir un poco de avena o granola casera para darle un toque crujiente. También puedes añadirle alguna semilla, frutos secos o crema proteica si necesitas llenarte aún más de energía.
Porridge de avena con manzana
Uno de los mejores ingredientes que puedes incluir en tu desayuno es la avena porque tiene un alto porcentaje en fibra y muy poca grasa. Es además realmente versátil y puedes tomarla en muchos formatos, uno de los más comunes es en porridge. Estas gachas de avena las puedes preparar con agua, leche, bebida vegetal o yogur y añadirle las frutas o especias que más te gusten. ¿Te gusta la tarta tatín de manzana? Entonces tienes que probar esta propuesta de Vikika.
Tortitas de plátano
Otra manera de tomar fruta es en forma de tortita para quitarte el antojo de dulce que puedes tener por las mañanas. Puedes hacerlas simplemente de plátano o combinar este con avena y después ponerle como topping un poco de yogur, por ejemplo. Un minuto en la sartén con un poquito de aceite de oliva para que no se peguen y listo.
Vasitos de chía con yogur
Puedes prepararla el día anterior y es perfecta para llevártela a cualquier parte esta propuesta. Desde Futurlife nos animan a hacerlo mezclando un poco de yogur con chía, fruta troceada, frutos secos tal cual o en crema y un poco de leche o bebida vegetal. Deja que durante la noche se combinen bien todos los sabores, remueve y disfruta.
Tostadas con fruta
¿Eres de las que necesita un poco de pan por las mañanas? Aunque no es la mejor opción si tu objetivo es perder peso, puedes prepararte alguna tostada con ingredientes buenos como un poco de tomate, un chorrito de aceite de oliva, aguacate troceado o con combinaciones de fruta y yogur como esta que hemos encontrado en Instagram.
Tortilla rellena
Por último, una idea que puede servirte tanto como de desayuno como de cena. Es muy sencillo de hacer en casa y es una manera fantástica de darle una vuelta a la tortilla francesa de siempre, la cual es también una fórmula genial para empezar el día de la mejor manera posible si te gusta acompañar tu café o té con una comida salada. Solo tendrás que pensar en los huevos como base de una especie de tortita y rellenenarla de tus ingredientes favoritos.
A esta variedad de desayunos le puedes sumar muchos más como, por ejemplo, algún smoothie, unos huevos escalfados con un poco de pan integral o algún bizcocho casero con el que darte el capricho los fines de semana. Solo es cuestión de cambiar los hábitos e ir probando con los alimentos saludables que tengas por casa hasta dar con las combinaciones que más encajen con tus gustos y estilo de vida.
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