La tarta de melón de Paula Ordovás sin azúcar ni harinas que es perfecta para comer algo dulce y fresquito este verano

Una tarta deliciosa y dulce para la que no necesitas horno ni azúcar. Así es la receta que nos ha compartido Paula Ordovás.

Los dulces. Esas recetas que se nos resisten a la hora de descartar el azúcar o las harinas refinadas haciéndolas no muy sanas para mantener una salud de 10. Tampoco ayudan a tener un vientre plano, la verdad. Durante el confinamiento unos de los pasatiempos favoritos, más allá de la pintura o Netflix, ha sido la cocina. Muchos de nosotros hemos recurrido a practicar recetas que teníamos pendientes, a experimentar con lo que teníamos en la nevera y así distraernos de las horas en casa. Aunque no muchas de las recetas que podemos hacer nos mantienen la línea (sobre todo pensando en los futuros bañadores y la playa).

Las harinas refinadas y el azúcar provocan inflamación en el abdomen, entre otras desventajas, y por esa razón de cara al verano intentamos evitarlas pero, ¿qué hacer con esos postres deliciosos cuando queremos matar el gusanillo de algo dulce? Paula Ordovás tiene la respuesta.

Nuestros antojos dulces tienen una solución este verano: las tartas de frutas sin horno. Ya vimos una receta, parecida a esta, que también compartió Paula Ordovás con arándanos y polvo de açai. ¡Ahora nos propone utilizar el melón, la leche de coco y el queso crema para chuparnos los dedos de nuevo!

Para esta tarta no vas a necesitar horno, ni azúcar ni harinas. Prepara la lista de la compra para alucinar con el sabor de este postre.

Ingredientes:

--Para la base:

150 gramos de almendras tostadas (o fruto seco favorito)

12 dátiles sin hueso

40 gramos de aceite de coco derretido

Ralladura de un limón pequeño

Zumo de 1/2 limón

--Para la tarta:

500 gramos de melón troceado muy pequeño

250 gramos de queso fresco batido 0% (o yogur griego)

250 gramos de leche de coco para cocinar

2 sobres de gelatina neutra

Ralladura de 1 limón

--Para decorar:

Bolitas de melón

Hierbabuena

Chips de coco

Pistachos

Rodajas de limón

Flores preciosas 😊

Elaboración:

Empieza haciendo la base: Pon los dátiles a remojo en agua caliente durante 5 minutos (esto es para que se ablanden y resulte fácil triturarlos). Escurre y pon las almendras en el vaso de la batidora o robot de cocina y tritura. Añade a la batidora el resto de ingredientes de la base (dátiles, aceite de coco, ralladura y zumo de limón), y vuelve a triturar con una pizca de sal. No importa si te quedan trocitos. Aprieta con los dedos y procura que quede todo del mismo grosor. Mete a enfriar 15 minutos en el congelador.

Continuamos con la tarta: Pela el melón y córtalo en dados muy pequeñitos. Reserva. Mete la gelatina 5 minutos en agua fría. Templa en el micro un poco de la leche de coco y disuelve en la gelatina. Pon el queso fresco batido con el resto de la leche de coco y la ralladura de limón en un bol, y bate con una batidora de mano hasta que quede espumoso. Añade el resto de la leche con la gelatina disuelta y también el melón troceado. Mezcla bien. Saca la base del congelador y vierte todo sobre ella. Guarda en la nevera toda la noche (mínimo 5 horas).

Al día siguiente, desmolda tu tarta y decora con unas bolitas de melón y tus favoritos para que además de rica quede súper bonita. Recuerda que la comida entra por los ojos.

¡Y listo! Ya tienes una tarta fría, dulce y libre de remordimientos para disfrutar de este antojo delicioso después de cada comida durante el verano. No dudes en probarla y personalizarla con los ingredientes y frutas que más te gusten.

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