¿Centrales nucleares? No, gracias: mujeres por el cambio

Connie Hedegaard Comisaria de Acción Climática de la UE. Ha sido ministra de Medio Ambiente en Dinamarca. «No hay que precipitarse tras el accidente de Japón. Las 143 plantas nucleares europeas no van a desaparecer de un día para otro. Eso no significa ni que esté en contra ni a favor: solo constato una realidad. Lo que no querría es que si algún estado decide apartarse de la energía nuclear recurriera a otras más contaminantes como el petróleo o el carbón… Si buscan cambiar, creo que las energías renovables son la opción que mejor contribuirá a la eficiencia energética. Y cuanto más eficientes seamos al ahorrar energía, mejor; sobre todo, por los altos precios del petróleo.»

Isabel Ripa Autora de ‘El Cambio Climático’ (Viceversa), trabajó en proyectos de Biodiversidad en la ONU.«Con lo que hemos visto en Fukushima se corrobora que las centrales nucleares no son infalibles y los efectos de un mal funcionamiento son devastadores y difíciles de prevenir. Es necesario evaluar las opciones energéticas teniendo en cuenta no solo sus costes y beneficios económicos sino también sus costes y beneficios sociales y ambientales. Personalmente, preferiría que se trasladaran todos los recursos de la energía nuclear a desarrollar más aún las energías renovables. Creo que su desarrollo se vería impulsado si hubiera más mujeres en las decisiones energéticas.»

Miren Gutiérrez Periodista de temas medioambientales, es la actual directora de Greenpeace España.«Antes de Japón ya estaba claro que tendríamos que prescindir de la energía nuclear. No solo es peligrosísima sino que produce residuos que duran miles de años. Sería un error terrible si, tras Fukushima, pasamos a depender aún más de energías sucias como el carbón o los combustibles fósiles. La solución está en las energías renovables que, además de una solución contra el cambio climático, pueden generar empleo e inversión. Tener un sistema energético basado 100% en las energías limpias ya es posible económica y técnicamente. Solo hace falta voluntad política.»

Mónica Frassoni Copresidenta del Partido Verde Europeo, formado por 32 partidos ecologistas de distintos países. «No había que esperar a la tragedia de Japón para descubrir que la energía nuclear sigue siendo insegura, muy cara e ineficaz para resolver los cambios climáticos. Después de Chernóbyl se han construido muy pocos reactores, y la energía nuclear solo produce el 13% de la electricidad global, menos que la hidroeléctrica. Esta catástrofe es una oportunidad para concentrar el debate público en las energías alternativas. Hoy, los estados y los consumidores saben que hay que hay que reducir emisiones y ya hay tecnologías para producir energía sostenible que no existían hace 25 años.»