El #bonitismo y #KonMari, movimientos para ser feliz

Una de las características de quienes practican el bonitismo es que les gusta recordarse de vez en cuando las cosas bonitas de la vida.

Con el bonitismo nada es al azar, hasta la decoración de las paredes está equilibrada.

No es fácil, pero si consigues tener prendas que te sienten (y te hagan sentir) bien, habrás alcanzado el éxito.

A los amantes del bonitismo les gusta vivir el movimiento incluso fuera de casa en tiendas, bares, restaurantes... ¿Sabes ese bar con mesas de palés? Pues ya sabes.

Si no te hace feliz, no lo necesitas. Este es el libro que lo comenzó todo.

Su efecto es tal, que en muchos lugares de América y Japón se nota que la gente ha comenzado a donar libros y ropa.

Y el resultado son estanterías, armarios y despensas con menos cosas, pero importantes.

Si crees que nunca tienes nada que ponerte pero no puedes abrir tus cajones... Algo pasa.

¿Crees que 36 pares no son suficientes?