El gesto 'boomer' del rey Felipe VI al hacer una foto con el móvil (y la ayuda de la princesa Leonor en modo 'Gen Z')

La tradicional misa de Pascua en Palma a la que asistía toda la familia real el Domingo de Resurrección ya es historia. El rey Felipe VI, la reina Letizia y sus hijas han decidido poner fin definitivamente a la arraigada costumbre de la familia real de viajar a Mallorca en estas fechas (donde hasta hace unos años se reunían todos los Borbón), y, por el contrario, han preferido pasar estos días de descanso en Madrid. 

Aunque es difícil saberlo con certeza ya que, por razones de seguridad, la Casa Real nunca ofrece detalles sobre sus vacaciones privadas, lo cierto es que en los diez días que los monarcas han despejado sus agendas institucionales solo se han dejado ver en público una vez y ha sido en la localidad madrileña de Chinchón. Hasta allí han acudido la noche del Sábado Santo en compañía de la princesa Leonor, que está en España aprovechando el ‘spring break’ de su internado de Gales, y de la infanta Sofía, cuyas vacaciones escolares le han permitido acompañar a sus padres y hermana a la representación de la pasión viviente que unos 250 habitantes del pueblo interpretan cada año y que está considerada Fiesta de Interés Turístico Nacional desde 1980. 

La presencia del jefe de Estado y su familia ha causado un gran revuelo en el municipio, sobre todo la de la princesa de Asturias y la infanta, ya que ha sido su primera aparición pública en lo que llevamos de año. 

No han pasado desapercibidos los looks de la reina Letizia y la princesa Leonor, que evidencian una vez más que madre e hija comparten armario de forma habitual: mientras que la consorte ha recuperado una blusa bordada de Sfera de su hija, ésta le ha cogido prestado un chaleco de Roberto Verino a su madre. Sofía, por su parte, se ha decantado por un ‘outfit’ cómodo en el que destacan las zapatillas. 

El divertido momento padre-hija del rey Felipe V y la princesa Leonor

Más allá de las cuestiones de moda, ha habido un divertido detalle que ha atrapado la atención de las cámaras. Todo ha ocurrido cuando don Felipe ha sacado el móvil para inmortalizar un momento del evento religioso… ¡y ha necesitado la ayuda de su primogénita para conseguir enfocar la cámara! (Puedes verlo en vídeo en el encabezado de esta noticia).

La estampa, que ha sacado la sonrisa de ambos (y también la de las redes), pone de manifiesto que la fluidez de la adolescente a la hora de manejar el teléfono supera a la de su padre. Y seguro que muchos de sus generaciones -la 'baby boomer' en el caso del rey; la Z en el de la princesa- se han sentido identificados al verla. ¡Viva la complicidad entre padres e hijas!