El protocolo por el que las mujeres estaban obligadas a cubrirse la cabeza en el funeral de Isabel II

Sombreros, velos, diademas y casquetes protagonizaron los looks de las asistentes al último adiós de la reina por expresa petición de la monarca.

Meghan Markle, con sombrero en el funeral de Estado de la reina Isabel II

Meghan Markle, con sombrero tipo pamela y ojos ahumados en el funeral de Estado de la reina Isabel II.

/ WPA-Pool

Traje oscuro, chaqué de luto o uniforme militar de gala para ellos; y traje corto oscuro –con medias oscuras– y cabeza cubierta para ella. Esta era la etiqueta marcada para asistir al funeral de estado de Isabel II que ha tenido lugar en en la abadía de Westminster de Londres ante la presencia de mandatarios de todo el mundo.

Camilla Parker con un tocado, la reina Letizia con una diadema con lazo de la firma sevillana Cherubina, Meghan Markle con una pamela, Kate Middleton con un sombrero... todas las asistentes al último adiós a la reina cumplieron estrictamente con el protocolo siendo cada una fiel a su estilo, incluso la pequeña Charlotte se cubrió la cabeza como su madre con un diseño que llevaba incorporado un lazo de terciopelo para presentar sus respetos a su bisabuela.

La princesa Charlotte, impecable

La princesa Charlotte, impecable en el funeral de la Reina Isabel II

/ Tim Rooke

Este requerimiento de llevar la cabeza cubierta estaba marcado por la propia Isabel II en el guion que dejó preparado durante su reinado en el que se establecían los pasos a seguir tras su fallecimiento. Pero, además, esta cuestión tiene también connotaciones religiosas como recuerdan los expertos de Protocolo y Etiqueta: "la Iglesia consideraba el cabello de la mujer como un atributo sexual que la mujer debía ocultar. Por eso se han utilizado a lo largo de la historia todo tipo de velos, mantos, mantillas, etcétera, para cubrir la cabeza de la mujer en estos lugares de culto".

Hay que recordar también que en la cultura británica es muy habitual el uso de tocados o sombreros como un accesorio más en los looks de la aristocracia, ya que es un símbolo de elegancia y estatus que se aprecia en contextos más festivos como, por ejemplo, las bodas o las carreras de caballos de Ascot.

Es por esto que cada una de las mujeres que fueron invitadas al acto religioso escogieron diferentes fórmulas para ocultar parte de su pelo manteniendo el luto riguroso, el cual, por cierto, solo podía contar con joyas compuestas por perlas como accesorios.

La reina Máxima de Holanda y el rey Willem-Alexander en el funeral de la reina Isabel

La reina Máxima de Holanda y el rey Willem-Alexander en el funeral de la reina Isabel.

/ Tim Rooke/Shutterstock

Mención a parte merece el velo, el cual fue utilizado por la mayoría de las asistentes. No fue largo y opaco como el que sí que se lucía antiguamente –la propia Isabel II así lo lució tras la muerte de su padre, Jorge VI en 1952– pero sí tipo red, como el que lucieron Máxima de Holanda, la reina Letizia, Rania de Jordania además de, por supuesto, Kate Middleton, quien se ciñó a la perfección a su papel de Princesa de Gales.

Se desmarcó del velo oscuro Meghan Markle, quien prefirió llevar su rostro completamente al descubierto con maquillaje que destacaba por el ahumado de los ojos.

Síguele la pista

  • Lo último