La gloria de Elliot Page o cómo ser feliz cuando al resto solo le importan las apariencias

El actor narra en 'Pageboy' su descubrimiento como una persona 'queer' y, después, como trans

El actor Elliot Page
El actor Elliot Page / Gtres

Hay memorias que, cuando se leen, se siente cómo quien las ha escrito al fin ha encontrado la paz mental que necesitaba, de abrirse, de contar su historia, su verdad, la única verdad en realidad. Eso es lo que se respira con 'Pageboy', la autobiografía de Elliot Page, que ha llegado recientemente a España de la mano de la editorial Tendencias y gracias a la cual hemos podido conocer cómo fue el proceso de transición del actor, a quien muchas de nosotras recordamos por 'Origen'.

"La disforia solía ser mayoritaria en verano. Sin capas, solo una camiseta, constantemente mirando hacia abajo... Se siente tan jodidamente bien tomando el sol ahora. Nunca pensé que podría experimentar esto. La alegría que siento en mi cuerpo", escribió el protagonista de esta historia hace apenas unos meses en Instagram, luciendo, orgulloso pero sobre todo satisfecho, un cuerpo que hasta antonces había rechazado. Hasta ahora no habíamos intuido lo que significó este gesto para él.

Leyendo este libro, se entiende perfectamente por qué aquel momento fue clave para la estrella de cine, que llevaba toda su vida fustigándose por tener el cuerpo que tenía, por tener que lucirlo como al resto del mundo le gustaba que lo hiciese. Fue cuando, al fin, cambió las sesiones de fotos con actitud 'femenina', los tacones y los vestidos ajustados por las camisetas, los boxers y las zapatillas.

Hay un capítulo, incluso, en el que narra lo feliz que fue cuando se puso un slip para hombre en una tarde de piscina. Era solo en los sets de rodaje cuando realmente se sentía comprendido por los que la rodeaban. Dos de las actrices y compañeras de trabajo a las que menciona con especial cariño son Drew Barrymore y Catherine Keener.

"Peluquería, vestuario y maquillaje en el trabajo solían ser una pesadilla para mí. Irónicamente, interpretar a una adolescente embarazzada fue una de las primeras veces que sentí un mínimo de autonomía en plató. Llevaba una barriga falsa, pero no me hiperfeminizaban. Para mí, 'Juno' era un símbolo de lo que podía ser posible, un espacio más allá de lo binario", llega a reconocer en este libro, en el que también habla de lo mucho que le costaban las pruebas de vestuario con ropa heternormativa: "Me machacaban las entrañas, como espolones rasgándome los órganos. Pruebas para sesiones de fotos y estrenos... Caía en picado en una espiral hacia una profunda depresión", asegura.

Si hay algo que marca el tono de las páginas de estas memorias es la inseguridad y la tristeza, puesto que Elliot reconoce en varias ocasiones que no sabe por qué es infeliz ni tampoco sabe en qué 'cajón' meterse (homosexual, queer, trans...), entre otras cosas, porque no siente el apoyo ni la necesidad de hacerlo y porque sin esas etiquetas sí que tiene la fuerza suficiente para ser, estar, actuar y, en definitiva, vivir como merece. Al fin lo ha conseguido y basta con echar un vistazo a alguno de los capítulos de su libro para saber que valía la pena intentarlo.

Tags _

Síguele la pista

  • Lo último