Drew Barrymore se siente "libre de la tortura de la culpa" tras dejar el alcohol

Poco quedaba de la niña que conocimos en 'E.T. El extraterrestre' cuando Drew Barrymore tenía 13 años. Poco antes, a los 7, tomaba alcohol disfrazado de helados de Baileys y con 9 años, copas con algunas de las estrellas más reconocidas del 'Star System'. A los 10 se fumó su primer porro y a la edad que decimos, cuando todavía no había alcanzado los 15, ya estaba ingresada en un centro psiquiátrico tras haber intentado suicidarse. Así lo contó hace unos años en la revista 'People', cuando encontró una forma de sanar y suavizar (que no olvidar) el recuerdo que tiene sobre sus primeros años en este mundo la mayoría de las veces hostil en su vida.

Desde entonces, la actriz ha dado alguna que otra pincelada más sobre cómo era su vida mucho antes de que el resto de los mortales probara el alcohol, aunque sin duda la más gratificante tuvo lugar en una entrevista para la CBS en 2021, donde la ahora también productora confesó que había dejado de beber dos años y medio antes. "Me di cuenta de que no me servía ni a mí ni a mi vida. Estoy trabajando por el buen camino para que haya paz donde antes había demonios", comentó entonces, reconociendo que se había dado cuenta de que su vida había cambiado y mejorado a raíz de abandonar estos hábitos.

Recientemente, la protagonista de '50 primeras citas' ha comentado en qué punto vital se encuentra y lo ha hecho en una revista propia, que recibe su mismo nombre y que comenzó a publicar en agosto de 2021. Además de los habituales temas de las publicaciones enfocadas al 'lifestyle', como la belleza, la alimentación y los viajes, en esta la actriz también revela algunas de sus reflexiones más personales y, entre ellas, ha tenido cabida lo "liberador" que ha sido apartar el alcohol de su vida. Según Drew Barrymore, dejar la bebida le ha permitido "ser libre de la tortura, la culpa y la disfunción". Solo gracias a eso, cree que está abierta a cualquier cambio en su vida, incluido encontrar una persona con la que compartirla.

"No veo la hora de conocer a esa persona tranquila con la que pueda ser feliz. Todavía no la he encontrado, pero creo que está por ahí", ha escrito la también empresaria, que sí ha pasado por el altar tres veces: Jeremy Thomas primero, Tom Green a continuación y Will Kopelman, que el más reciente, de quien se divorció en 2016 y con quien tiene dos hijas, Olive y Frankie, de 10 y 8 años, respectivamente. Lo mejor de todo es que la actriz de 'Santa Clarita Diet' ha demostrado tener una vida tranquila, llevarse bien con el padre de sus hijas y, por encima de todo, que de lo más profundo de un pozo negro también es posible salir. Un ejemplo.