¿Qué tienen esos productos todo terreno que lo mismo sirven para calmar rojeces, que para hidratar, lograr un efecto glow o reducir la inflamación y el dolor cuando nos damos un golpe?

El secreto está en una formulación natural y de eficacia probada, que los convierte en productos multifunción para los SOS de nuestro día a día. ¡Toma nota!

Las cremas multiusos para hidratar, calmar rojeces y conseguir un efecto 'glow'

Las cremas multiusos para hidratar, calmar rojeces y conseguir un efecto 'glow'.

/ AleksandarNakic

Formulas ancestrales

Ahí reside la clave. La mayoría mantiene intacta su formulación desde hace décadas: “Aceites vegetales que nutren y reparan junto a extractos biológicos de plantas medicinales como el pensamiento, el romero, la manzanilla y la caléndula”, explica María Garnica, directora de marketing de Weleda para desvelar el secreto de su producto Skin Food con casi 100 años de antigüedad. “La clave de este tipo de tratamiento está en los ingredientes”, afirma Elizabeth Pérez-Schafer, responsable de comunicación de L’Occitane que explica la tradición de su firma en apoyarse en remedios caseros a base de plantas que ya se utilizaban tradicionalmente para diferentes dolencias: “La siempreviva se conocía en la cultura mediterránea por sus propiedades antiinflamatorias reparadoras y cicatrizantes. La lavanda es famosa por sus propiedades relajantes y purificantes. La manteca de karité se utiliza desde hace siglos en África occidental para nutrir, proteger y reparar la piel…”, enumera.

Para todos los públicos

Cubren todas las necesidades de la piel y sus fórmulas naturales los hacen aptos incluso para las pieles más sensibles y dañadas. Se pueden aplicar sin reparo todas las veces al día que se necesite o desee.

Texturas fundentes

Mantecas, bálsamos semisólidos, cremas ricas… A menudo se presentan en fórmulas densas de gran poder reparador y nutritivo, que conviene calentar con los dedos antes de aplicar. La máxima de ‘menos es más’ es clave con estos productos de los que hay que aplicar poca cantidad para que absorba.

Múltiples usos

Rostro: Mejora las zonas más expuestas al frío y sequedad (labios, pómulos…). Atenúa las rojeces y es ideal en las aletas de la nariz para calmar la piel durante los resfriados. También doma las cejas rebeldes fijándolas y dejándolas lustrosas. Desde Weleda, recomiendan además su uso como mascarilla antes de ir a dormir para amanecer con el rostro revitalizado.

Manos y pies: Alivia la sequedad y recupera las manos agrietadas por el frío. Da brillo a las uñas e hidrata las cutículas. En los pies además ablanda durezas y repara talones agrietados.

Cuerpo: perfecto par suavizar las zonas más rugosas: codos, talones, nudillos o para reparar (y prevenir) rozaduras y pequeños rasguños. También calma las picaduras de insectos y las quemaduras solares, y es perfecto como prolongador del bronceado. Tras la depilación, es un bálsamo reparador que deja la piel suave, sin rojeces ni picores.

Como perfume: aplicado en la zona de pulso de las muñecas difundirá sus agradables aromas.

Cabello: Suaviza las puntas secas y potencia el brillo.

Maquillaje: Muchos make up artist de todo el mundo utilizan estos productos como ‘primer’ para revitalizar un rostro cansado antes de aplicar el maquillaje. Pero también se puede aplicar encima del maquillaje como iluminador. No es raro verlos en los backstage de las Fashion Weeks.

Formatos nómadas

Sus múltiples usos hacen que sea muy práctico llevarlos en el bolso. A eso se suma el diseño de sus envases: “Este tipo de productos ‘all in one’ suelen venir en tamaños fáciles de llevar y suponen un SOS en el día a día: labios secos, zonas sensibilizadas, cutículas, rojeces…”, enumera Elizabeth desde L’Occitane.

Tendencia minimalista

El auge que están adquiriendo este tipo de productos también se debe a nuestro estilo de vida. “Con el ritmo de vida actual, muchos consumidores buscan soluciones multiuso que resuelvan varias necesidades de una vez: suavizar, reparar, calmar, aportar brillo o incluso relajar….”, apunta la responsable de comunicación de L’Occitane que también lo relaciona con las distintas tendencias que hay en el cuidado personal: “En Corea, por ejemplo, las rutinas de belleza implican múltiples pasos, mientras que en Francia se simplifican porque se busca un aspecto natural y fresco que no aparente esfuerzo”. En Weleda ven difícil hablar de tendencia teniendo en cuenta que su fórmula ha permanecido intacta desde 1926: “Creo que la razón principal de su éxito es su eficacia y los increíbles resultados que las mujeres perciben en sus manos, pies, rostro, labios…”, afirma María Garnica que agradece que, “mientras que las rutinas de cuidado facial cada vez son más sofisticadas e incluyen más productos, es genial poder contar con uno que soluciona los pequeños problemas de la piel del cuerpo y rostro en el día a día”.

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