¿Tienes granos? Este es el aceite limpiador con el que te tienes que desmaquillar para evitar el acné

Solo quien convive con los granos, sobre todo ahora, que con el uso de las mascarillas la mayoría sufrimos acné. ¿Te pasa? Pues que sepas que uno de los pasos más importantes para atajar el problema empieza cuando te desmaquillas. Es más, si no te desmaquillas, deberías limpiar tu piel una vez por la mañana y otra por la noche. Podrás prescindir del contorno de ojos, podrás saltarte el de la crema hidratante -en el caso que lo quieras sustituir por un sérum-, pero los expertos recomiendan tener la piel limpia y que nunca te saltes el paso de la limpieza, que arranca con un aceite limpiador.

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“Hay tres tipos de acné: acné leve (generalmente en el inicio de la adolescencia), luego tenemos el acné inflamatorio (en el que ya encontramos proliferación bacteriana e inflamación y después el acné nodular o severo (aparecen lesiones inflamatorias y profundas que pueden dejar cicatriz). Es muy importante determinar el tipo de acné para poder realizar un tratamiento adecuado”, cuenta el dermátologo Guillermo Solano-López sobre el higiene de las pieles acneias. Sea cual sea el tipo de acné, es esencial la limpieza diaria. “La higiene se debe de hacer con un producto sin jabón y respetuoso con el ph de la piel. Si utilizamos jabones agresivos con la piel se daña la película lipídica, la piel realiza un efecto rebote que provoca una hiperseborrea. Se recomienda utilizar productos de limpieza con ph fisiólogico como los Syndet (sin detergente), las lociones micelares o los aceites limpiadores “, añade el doctor Solano- López.

Nosotras acabamos de probar el aceite limpiador purificante de la gama Hyséac de Uriage (14,50€), especial para pieles acneicas, que desmaquilla y purifica la piel sin dañarla. ¿Un aceite para el piel grasa? Sí, no tengas miedo porque esa textura es capaz de magnetizar la grasa, que la disuelve y limpia los poros y respeta la película hidrolipídica natural de la piel.

Contiene dos activos aptos para este tipo de piel: el aceite de girasol y el aceite de nigella, con reconocidas virtudes purificadoras, y un derivado del ácido málico, con acción exfoliante y reguladora. Además contiene vitamina E, antioxidante, la encargada de aportar brillo a la piel. Después, continúa la rutina con un jabón para el rostro o un tónico.