Este cepillo de madera para el pelo no solo desenreda sino que elimina los restos de champú

Todas las chicas con el pelo largo deben probar este cepillo de madera que transforma la melena suave, brillante y sana.

Cuando hablamos de cepillarnos el pelo siempre nos viene la misma imagen a la cabeza: una mujer retratada en un cuadro impresionista que se sienta en su tocador a pasar las horas cepillando su melena. Tenemos la idea de que el ritual de cepillarse el pelo solo combina con un estilo de vida reposado y no con nuestra ajetreada rutina, pero lo que no sabemos es que se puede llegar a un punto intermedio.

Si, cada vez más, tenemos presente los ingredientes y calidades de los champús y mascarillas que utilizamos, ¿por qué no tenemos un cepillo de calidad? Además de desenredar el pelo, cepillar la melena tiene muchos más beneficios y aquí te explicamos cuáles.

Si buscas una melena suave y brillante el truco más efectivo es incluir el cepillado en tu rutina diaria. Peluqueros y expertos no paran de repetir lo beneficioso que resulta tanto para el pelo como para el cuero cabelludo esta práctica.

¿Por qué debemos cepillar nuestro pelo? Activamos la microcirculación sanguínea consiguiendo un pelo suave y sedoso. Además, las melenas más largas tienden a recoger más suciedad del ambiente. Pelusas, contaminación, polvo, etc. Sí, tu pelo, al igual que tu piel, adhiere las partículas de tu entorno. El cepillado elimina esas impurezas así como los restos de laca, geles y productos que utilicemos. De hecho, los peluqueros recomiendan cepillar el pelo antes de lavarlo para retirar la piel muerta del cuero cabelludo.

El principal beneficio del cepillado es llevar la grasa del cuero cabelludo y repartirla uniformemente desde la raíz hasta la punta y que esta grasa sirva de protección natural a nuestro cabello. No te engrasará la melena, sino que la hidratará y la protegerá.

¿Qué tipo de cepillo es recomendable? Lo adecuado es hacerlo con un cepillo de buena calidad, con cerdas de fibra natural y de puntas redondeadas. Es una inversión que durará años y que te garantiza no maltratar tu cabello con materiales plásticos que añaden electricidad estática. Este cepillo de Laconicum (28,50 euros) ha estado expuesto en el MoMA y está realizado a mano en Italia.

Lo mejor es realizar el cepillado dos veces al día, por la mañana y por la noche. Pero si todavía no tienes esta rutina interiorizada, puedes probar a cepillarlo antes de lavarlo, luego antes de irte a dormir cuando ya tengas todas tus cremas del rostro y por último incluir el cepillado por la mañana.

Los resultados se ven a la semana de empezar con la práctica y realmente son asombrosos.