El look de invitada perfecto para una boda de día existe y lo ha llevado Teresa Andrés Gonzalvo
Traje de chaqueta y tocado, ¿alguien da más?
La primera opción que se nos pasa por la cabeza cuando tenemos que buscar qué ponernos para una boda siempre es la del vestido. Y, por mucho que éstos nos gusten en sus cientos de versiones, no podemos olvidarnos de todas las posibilidades que ofrece un bonito mono, un cómodo traje o una sencilla combinación de blusa y pantalón.
Pero también hay una combinación que no solemos plantearnos y parece un éxito seguro. El traje de chaqueta y falda que tanto juego dio en los años 80 (véase a Melanie Griffith en la película 'Armas de mujer' como mejor ejemplo) puede ser un valor seguro si se sabe bien cómo lucirlo. Sobre todo ahora que esa década que tantos sentimientos encontrados genera vuelve a ser foco de atención en la moda.
La prueba de que la fórmula funciona nos la mostrado Teresa Andrés Gonzalvo con un diseño de Navascués que es pura elegancia.
Aprovechando que se trataba de una ceremonia de mañana, ha sido en la boda de Marta Pombo y Luis Giménez celebrada en Santander donde la influencer ha aparecido con una blazer de silueta XL que llevaba las hombreras marcadas y solapas blancas en tamaño maxi ajustada con un gran cinturón a juego con una falda en el mismo tono turquesa.
Un dos piezas al que le ha añadido dos detalles imprescindibles para marcar la diferencia, un tocado y unos guantes largos, y que ha querido acompañar de unos zapatos de Magrit en nude, joyas vintage y un discreto peinado formado por una coleta baja.